Confesiones vespertinas en horas de oficina

Portada de la edición colombiana de Cuentos para después de hacer el amor (Plaza y Janés) que se sigue vendiendo año tras año, edición tras edición, desde 1983

Después de ir a nadar a las 9 45 am e intentar batir mi marca en los 25 metros libres -lo que no logré: apenas hice 17 segundos, cuando mi marca es 15 (como siempre he sido muy ideático -espero estar  acuñando la palabra- he llegado a la siguiente conclusión: cuando llegue el mes en que no pueda mejorar una marca personal en natación, aceptaré que me estoy haciendo viejo). Después de ayudar a mi máneger a preparar espagueti con atún y de echarme un coyotito, c est a dire dormir-- una hora, vine a la oficina. Aquí después de revisar un libro sobre Derechos Humanos que estoy editando para la  UV, después de leer mi dosis del libro de Héctor D'Alessandro (El cucaracho y otros cuentos) para seleccionar los mejores con el objetivo de que se publiquen en mi Editorial (nótese el abuso) Educación y Cultura, después de corregir 15 trabajos de  mis estudiantes de Letras, después de revisar mis tres cuentas de correo, mis tres blogs, después de leer por encimita La Jornada Veracruz,  después de rascarme la rodilla derecha y de poner la cafetera y de fumar un cigarrillo -a mi regreso de España reduje drásticamente el consumo de nicotina- me he sentao a escribir estas dulces o mustias palabras para mis queridos lectores, que ya no son 20 ni cincuenta, sino entre 70 y 120 diarios. Noticias: Educación y Cultura está haciendo los arreglos para presentar mi novela Historia de todas las cosas en el DF y en Puebla. He decidido no presentarla en Xalapa sino hasta mayo del 2012, durante la Feria del Libro Universitario. Espero que no coincida con mi -hipotético- viaje a Neiva, donde he sido invitado a celebrar los 25 años del Concurso de Novela José Eustasio Rivera, que yo inauguré ganando con una novela que me gusta mucho y que más bien por desidia no he vuelto a publicar: Los placeres perdidos Avanza (¿avanza?) la edición 14 de Cuentos para después de hacer el amor, que si Dios es grande, saldrá en editorial JUS algún día. No hay competencias de natación cercanas, de modo que por el momento seguiré entrenando tranquilo.